Para esta 40 edición del Festival de Cine “La Luz” Iberoamericano de Huelva, Iñigo, partió de los orígenes y señas de identidad de Huelva.
Queriendo hacer partícipe a la ciudad de origen del festival de cine, usa el cobre como principal material de las obras, haciendo un guiño a las Minas de Riotinto originales de Huelva.
Como bien indica el nombre del festival, el premio “La Luz” hace referencia al reconocimiento a las personas e insituciones que dan “luz” a la cultura con su trabajo. Este premio fue otorgado, entre otros, a Mario Casas, Belen Cuesta, Aitana Sánchez Gijón, Soledad Villamil y el Ayuntamiento de Valladolid en reconocimiento a la Seminci, otro festival de cine realizado anualmente en la citada ciudad.
La escultura representa el sol y a la vez la cultura, donde se concentra “La Luz”, en este caso el talento. Los haces de luz, serían las personas “iluminadas” y por lo tanto premiadas, que han destacado con su sobresaliente trabajo que junto al cobre, recuerda de dónde es el premio, completando la obra.